Abstract:
La edición de la documentación correspondiente a los informes científicos, así como de aquella concerniente a los proyectos elaborados por la Comisión de Estudios Hidrológicos, ha sido posible mediante un convenio firmado por la Universidad Nacional del Comahue, el CONICET y la Administración de Parques Nacionales. Participaron investigadores de las dos primeras instituciones, con financiamiento del Conicet. A ello se sumó un pequeño pero muy oportuno aporte de la Autoridad Interjurisdiccional de las Cuencas de los ríos Limay, Neuquén y Negro (AIC). Los documentos que salen a la luz fueron la responsabilidad del director de la mencionada Comisión, el Geólogo norteamericano Bailey Willis, formado en Europa y con una amplia experiencia obtenida en ese continente y en el oeste de su país. Estos trabajos reunidos en un único volumen, se caracterizan por la creatividad y la capacidad de abordar la complejidad del desarrollo socioeconómico. La capacidad de análisis, el rigor científico de los diagnósticos y proyectos, los que tienen una sorprendente calidad y magnitud, no explican las razones técnicas que pudiesen aducirse para que fuesen ignorados durante 102 años. Después de realizados, nuestra querida patria, la República Argentina, todavía sigue debiéndole a la Patagonia y a sus habitantes la concreción de esos proyectos y tantos otros que han sido debidamente estudiados posteriormente, sin que por eso se hubiese obtenido una esperada respuesta de los grupos hegemónicos nacionales que siempre se opusieron al desarrollo del interior del país. La confrontación de los contenidos del presente libro con el subdesarrollo actual, exhibe la magnitud de aquello que nuestro país pudo llegar a ser y que, además, muchos quisimos llevar adelante en nuestras vidas. Bailey Willis esperaba una respuesta a esas inquietudes desde los inicios de la actividad de la Comisión de Estudios Hidrológicos, cuando se firmó el contrato en setiembre de 1910. Aun cuando los trabajos según el contrato y sus prórrogas terminaron en junio de 1914, se concretó un nuevo contrato de un año de duración. Este último estipuló la preparación de los documentos para un segundo tomo quería continuidad del primero, también titulado “El Norte de la Patagonia” y cuyo subtítulo sería “Estudios y Proyectos”, cuyo objetivo fue el de la preparación de los borradores de esos trabajos que ahora se hacen públicos. Bailey Willis, después de mencionar los dos motivos iniciales que impulsaron la creación de la Comisión, esto es, la necesidad de facilitar la construcción del ferrocarril entre San Antonio Oeste y la necesidad de solucionar el problema de la escasez regional de agua en el sector extra andino, hace un reconocimiento al gran Ministro y patriota, Don Ezequiel Ramos Mexía, cuando entrega en 1938 (28 años más tarde) a la Dirección de Parques Nacionales de la Argentina los documentos borradores en inglés y castellano con los que él pensaba redactar el Tomo II del libro “El Norte de la Patagonia”, como forma de dar curso a las esperanzas de tan inusual funcionario.