Existen distintas acepciones del término «basamento» que pueden ser tomadas en el estudio de una cuenca sedimentaria: geológica, magnética, gravimétrica, y acústica. En la Cuenca Neuquina definimos al basamento geológico siguiendo el criterio de Llambías & Sato (2011) quienes lo refieren al Grupo Choiyoi, constituido por rocas metamórficas y cuerpos ígneos cuyas edades comprenden
desde el Silúrico muy tardío al Pérmico. Desde el punto de vista geofísico, el basamento magnético está formado por rocas con mayor susceptibilidad, cuya magnitud refleja principalmente la abundancia, naturaleza (magnetita – silicatos) y composición química (relación hierro / magnesio) de los minerales constituyentes comparada con los sedimentos suprayacentes; el acústico es
la interfase que representa el contraste de impedancias acústicas más profundo y continuo; mientras que las diferencias relativas de densidad en la interfase sedimentos – basamento ígneo-metamórfico son las responsables de las anomalías de gravedad de Bouguer.
Para los propósitos de esta contribución se debe tener en cuenta que: a) el basamento geológico y el basamento magnético pueden ser considerados como la misma discontinuidad; b) el basamento gravimétrico tiene muy buena correspondencia con el magnéticotoda vez que la magnetita tiene elevada densidad, pero puede no coincidir con el basamento acústico, y c) el basamento acústico es usado como control a escala de detalle de manera tal de reducir la ambigüedad inherente de los métodos potenciales, y puede estar cercano e inclusive coincidir estructuralmente con el basamento geológico. La investigación realizada permite una mejor comprensión del comportamiento geodinámico de la cuenca Neuquina especialmente en la región de antepaís, a través de la
caracterización de dominios magnéticos y estructura corticales; espesor elástico efectivo y rigidez flexural; distribución de flujo de calor actual en superficie y flujo de calor cortical; posición de hipocentros y geometría del plano de Wadati – Benioff; elaboración de modelos termomecánicos – reológicos de extensión; correlación entre la distribución de hemigrábenes triásico – jurásicos y
anomalías de gravedad, entre los elementos principales.
The basement of the Neuquén basin.- There are different meanings of the term «basement» in the study of a sedimentary basin: geologic, magnetic, gravimetric, and acoustic. In the Neuquén Basin, Argentina, we define the basement like a «Choiyoi Group» in the sense given by Llambías & Sato (2011), composed of metamorphic and igneous rocks with ages between Silurian to Permian.
From the geophysical point of view, the magnetic basement consists of rocks with a higher susceptibility, which mainly reflects the abundance of magnetite – silicates, and chemical composition (iron / magnesium ratio) of the forming minerals; meanwhile acoustic basement can be defined as the deepest and continuous seismic reflector; moreover, relative differences in density between
sediment and igneous / metamorphic interface are the main source of Bouguer gravity anomalies. For purposes of this paper we should take into account that: a) geological and magnetic basement can be considered the same discontinuity, b) gravity basement has not only high correlation with the magnetic ones, since magnetite has high density, but also can not match the acoustic basement, and c) seismic-acoustic basement is used only as a tool at detail scales to reduce the ambiguity of the potential methods, and may be close with the geology basement. This research provides a better understanding of the geodynamic behavior of the Neuquina basin, especially in the foreland tectonic areas, through the characterization of magnetic domains and crustal structure,
effective elastic thickness and flexural rigidity, current and cortical heat-flow, geometry of the Wadati – Benioff zones; rheology and thermomechanical modeling; and correlation between the Triassic – Jurassic rift deposits and gravity anomalies.