Loaiza, Marcelo; Monasterio, Julio; Riffo, Lorena; Rocha Varsanyi, Alan; Quiña, Guillermo; Dolcemáscolo, Agostina; Duquelsky, Paulo; Avilés, Luciana; Martínez, Catalina; Segovia Melo, Emilia
Resumen:
En este libro estudiamos diversos procesos de configuración hegemónica que se desarrollan en el territorio de la Patagonia Norte, y que se materializan en un heterogéneo campo de prácticas culturales, con la finalidad de analizar compleja trama que articula la relación entre cultura y poder. En esta clave, tres ejes organizan el texto. El primero, se vincula a la configuración de procesos de disputas de sentido en contextos sociohistóricos y territoriales específicos, para pensarlos en la trama coyuntural que se entreteje entre las prácticas, la cultura y el poder. El segundo, se focaliza en el análisis de los movimientos sociopolíticos que emergen y se desarrollan en el marco de la dinámica de conflictividad de la Patagonia Norte en los que el conflicto aparece como un enlace articulador entre las experiencias. En el tercero, analizamos las dinámicas asociativas de las producciones culturales y artísticas locales, las formas asumidas por la producción creativa y sus condiciones laborales concretas, marcadas por la precariedad con que se suele desplegar la producción cultural en la región. La propuesta de abordaje de las prácticas culturales desde su inscripción en procesos de configuración hegemónica, implica asumir que la hegemonía se presenta como un proceso social total. En esta configuración dinámica se exponen tanto procesos de disputa entre clases –entendidas como relaciones de desigualdad– como procesos de constitución de fuerzas sociales y sujetos colectivos. Esta configuración fija sentidos de lo posible y busca neutralizar, modificar o incorporar todas aquellas prácticas alternativas que rebasan los límites. Sin embargo, esta incorporación de las prácticas culturales jamás lo es en modo total o exclusivo, en tanto siempre se presentan prácticas y procesos que tensionan, resisten, resignifican o antagonizan con esa configuración hegemónica de manera situada desde instancias alternativas a contrahegemónicas. Consideramos que buscar los intersticios entre las formaciones, las prácticas, los discursos en tensión con las cuestiones hegemónicas y sus posibilidades de resignificación es volver a pensar sin garantías. Pensar sin la certeza de que las situaciones, o los objetos, o los discursos o los términos, hablan por sí mismos. Ya que estos hablan y se desarrollan en el proceso histórico, en la coyuntura y en función de esa tensión y en ese momento en que los podemos anclar en las situaciones que estudiamos.