Resumen:
El virus COVID-19 puso en aislamiento preventivo al mundo entero lo que obligó a Argentina a tomar una estrategia sanitaria denominada Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO). Luego, debido a los cambios en los hábitos y comportamientos generado durante el ASPO, se aplicó una segunda estrategia denominada Distanciamiento Social Preventivo y Obligatorio (DISPO), sostenida durante el 2020 y gran parte del 2021. Estos cambios obligaron a generar estrategias en todos los niveles de educación. En tal sentido, los niveles primarios y secundarios se cursaron virtualmente, incluyendo la clase de Educación Física y, por esto, se triplicaron las horas frente a las pantallas, disminuyendo así el tiempo empleado para realizar actividad física, y provocando modificaciones importantes en los niveles de condición física, el sueño, la alimentación y
el estado emocional. La situación que se describe, traerá consecuencias a futuro, por ello es necesario generar nuevamente adherencia al movimiento en los escolares. A raíz de lo expuesto, este artículo tiene como objetivo elaborar una serie de estrategias y recomendaciones pensadas en el entorno escolar, a través del docente de Educación Física, para revertir esta situación preocupante, ya que él tiene la capacidad de generar un
cambio de la situación descripta.