El presente artículo tiene por objetivo presentar una especie de repaso o mapeo inicial de algunos de los principales posicionamientos de feministas y grupos de mujeres indígenas de Nuestra América acerca de un hecho concreto: la polémica acontecida en noviembre de 2019 a raíz de los dichos de Rita Segato respecto del golpe de Estado en Bolivia, la figura de Evo Morales y el rol de los feminismos en tal escenario. El ensayo, pues, sostiene la hipótesis que estos dichos operaron como un ?disparador? que permitió se visualicen algunas de las expresiones más salientes del vasto escenario de feminismos contra-hegemónicos del Sur Global actual.El trabajo hace hincapié en la riqueza que reviste el ejemplo analizado en cuanto ejercicio de diálogo entre prácticas y discursos feministas, como intercambio cuestionador de los modos unidireccionales y verticalistas propios del poder patriarcal y de la política occidental entendida en un sentido tradicional. Reflexiona, además, sobre el peso y relevancia que adquieren las palabras de los intelectuales tanto al interior del campo académico como en la sociedad en general. Por último, deja abiertos algunos interrogantes en torno al modus operandi de las redes sociales, en tanto medio privilegiado para las disputas políticas contemporáneas, entre otras consideraciones.
The objective of this article is to present a kind of review or initial mapping of some of the main positions of feminists and indigenous women's groups of Our America about a specific fact: the controversy that occurred in November 2019 as a result of Rita's sayings Segato regarding the coup in Bolivia, the figure of Evo Morales and the role of feminisms in such a scenario. The essay, then, supports the hypothesis that these sayings operated as a “trigger” that allowed some of the most salient expressions of the vast scenario of counter-hegemonic feminisms of the current Global South to be visualized.
This paper emphasizes the richness of the analyzed example as an exercise in dialogue between feminist practices and discourses, as a questioning exchange of the unidirectional
and top-down modes of patriarchal power and western politics understood in a traditional sense. It also reflects on the weight and relevance that the words of intellectuals acquire both within the academic field and in society in general. Finally, it leaves open some questions about the modus operandi of social networks, as a privileged medium for contemporary political disputes, among other considerations.