Resumen:
Una pregunta extendida en el campo de la creatividad es qué tipo de pensamiento se
debiera fomentar en las personas para que sean más creativas. Se llevó adelante un
experimento en el que un grupo de participantes se enfrentó a un problema de tipo
mal definido y debió resolverlo aplicando la técnica de creatividad conocida como
torbellino de ideas, que implica el uso de un pensamiento de tipo extraordinario. Otro
grupo debió resolver el problema transfiriendo una solución conocida dada a un problema
análogo, lo que supone un modo ordinario de pensamiento. La creatividad de
las soluciones propuestas fue evaluada por jueces expertos. El análisis de datos no
arrojó diferencias entre las condiciones, por lo que ambos modos de trabajo resultaron
igualmente efectivos para promover la creatividad. Se discuten las implicancias de los
resultados obtenidos para las teorías que buscan explicar el pensamiento creativo y las
posibles formas de fomentarlo.