Resumen:
La crisis generada por la pandemia de Covid-19 obligó a organizar alternativas educativas no presenciales; situación que en la Educación Técnico-Profesional afectó uno de los ejes centrales: el aprendizaje desde la práctica. Ello obligó a generar nuevas estrategias para sostener las actividades de talleres y prácticas profesionalizantes. El presente artículo tiene el objetivo de examinar de qué manera las desigualdades previas y emergentes, vinculadas a las heterogeneidades territoriales, en el gobierno del sistema y en la propia implementación de las prácticas, configuraron escenarios distintos para el despliegue de políticas y estrategias a nivel de las jurisdicciones durante la pandemia. A partir de una investigación centrada en los testimonios de referentes jurisdiccionales de la Educación Técnico-Profesional y en datos secundarios descriptivos, se contrastan diferentes regiones del país, mostrando el modo en que las mencionadas heterogeneidades se constituyen en las condiciones de posibilidad para hacer frente a la pandemia y, por lo tanto, en las capacidades de atenuar o no, los efectos de la crisis sanitaria en la continuidad educativa.