Resumen:
La siguiente propuesta de trabajo está lejos de erigirse como una respuesta unívoca a los problemas actuales más acuciantes dentro del nivel medio. La deserción, el desgranamiento, la violencia, el fracaso escolar, la repitencia, las falencias de recursos o la falta de interés, son aspectos que no pueden dejar de mencionarse en cualquier escrito que se oriente a discutir las prácticas docentes en el marco de la problemática actual educativa. Sin embargo, la discusión de todas las variables que configuran el conflictivo ámbito de la educación media no es el objeto de estudio de este trabajo. En todo caso, nos ubicamos en la reflexión acerca de uno de ellos, las prácticas docentes, sin dejar de plantear categóricamente que si bien los ejercicios de reflexión sobre las prácticas son útiles y necesarios, no es solo el cambio de las prácticas y los currículos por donde debe girar el debate acerca de los problemas que afectan a la educación. Hay un contexto social, cultural, político y económico amplio en donde debemos enmarcar estos debates y reconocer que al fin y al cabo se trata de un debate político. Desde mi perspectiva, los problemas de la educación también son los problemas de la sociedad y de un sistema económico específico del que no podemos escindirnos.
Este trabajo ofrece un recorte concreto a partir del cual intento reflexionar en torno a algunas observaciones en mi trayectoria docente. Se centra en una experiencia particular poniendo en el tapete los problemas entorno a la participación y la acción de los sujetos en los contextos institucionales y no institucionales. Es por este motivo que la propuesta puede pensarse en términos del concepto de enseñanza situada en donde no solo se trata de “aprender haciendo” sino que se entiende al aprendizaje como una dimensión integral e inseparable de la práctica social.1Desde la perspectiva de los teóricos de la enseñanza situada, aprender y hacer son acciones inseparables, por lo que las personas han de aprender haciendo siempre dentro de un contexto particular. El agente (para mi sujeto), la actividad y el mundo se constituyen mutuamente.